lunes, 4 de julio de 2011

Érase una vez un chozo

José Gómez Jiménez, 'Pepe Corona', tiene en la vivienda pastoril su fuente de inspiración
04.07.11 - 00:02 -
ALFONSO BARRIGA GARCÍA | MALPARTIDA DE CÁCERES.

Teníamos curiosidad por conocer el taller de José Gómez Jiménez, conocido popularmente como 'Pepe Corona', un hombre que, por sus vivencias durante su infancia, tiene en el chozo como su principal fuente de inspiración y pasatiempo.
«Es mediopensionista, la otra media se la tiene que buscar como pueda», como dice él mismo y emplea el tiempo en su cochera rodeado de chozos, campanillos, cencerros, y todos los aperos propios de una vivienda de labranza, aunque en pequeño tamaño y utilizando casi exclusivamente el junco y el corcho.
La infancia de Pepe fue como la de muchos niños de aquella época de los años 50. Estuvo en la escuela hasta los seis años, hasta que su padre se lo llevó a la finca de Las Torres, donde no existía escuela alguna. De allí a La Lagartera, una finca más grande, que tenía una escuela en el cortijo principal. Como le caía tan distante para ir todos los días, terminó por hacer novillos y no volvió más. Con 16 años, en Valdesalor, sacó el certificado de Estudios Primarios.
Con todo el tiempo libre, en su cochera, evocando su infancia, se dedicó a hacer chozos recordando el mundo en el que había vivido, relata orgulloso, recordando todo lo que que rodeaba a las ovejas y su estancia en la majada.
Los chozos son su especialidad; los hay circulares, de media luna, chozuelos, de dos plantas. Asegura orgulloso que sus chozos «están por media España». No negocia con ellos, pero si algún turista lo quiere, no duda en vendérselo. Mientras le visitamos, un matrimonio se interesa por ellos, y se entretiene con ellos explicándoles características y usos de aquella época.
«La finca grande se dividía en cuatro 'cuajás', cada año se labraba una de las partes. Una vez que se segaba, quedaba la rastrojera a donde acudía el ganado. Se mudaba la 'maja' a la rastrojera y entonces se mudaba el chozo. Los grandes no se podía mudar, pero las medias lunas sí se llevaban en carros, a donde iban las cancillas».
Había otro tipo, él los llama 'chozuelos' que es un chozo pequeño en el que dormía el pastor junto al ganado, para evitar la presencia de los lobos.
El junco seco, el alambre y una navaja son sus herramientas.

http://www.hoy.es/v/20110704/sociedad/erase-chozo-20110704.html